Goma de mascar Mentos – La conversación se eleva – SA
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Hay muchas causas potenciales de la enfermedad de las encías que no están necesariamente relacionadas con un mal cuidado dental. A continuación hemos enumerado algunas de ellas. Esta lista no es en absoluto exhaustiva, pero incluye las causas más comunes.
Fumar y masticar tabaco, así como el empaquetamiento entre la mejilla y la encía, son los factores más directos para el desarrollo de la enfermedad de las encías. El sistema inmunológico y las acciones curativas regenerativas del cuerpo se ven comprometidas por el tabaco. Muchos cirujanos y dentistas restauradores no realizan determinados procedimientos, como implantes o injertos de tejidos blandos, en pacientes que consumen tabaco porque los resultados se salen de lo normal. Las manchas blancas precancerosas llamadas leucoplasia se encuentran en tasas mucho más altas en los fumadores que en los no fumadores.
Una de cada tres personas de la población estadounidense padecerá la enfermedad de las encías porque es portadora de rasgos de sus familiares. Esto ocurrirá tanto si se cuida la boca como si no, pero un buen cuidado en casa puede ralentizar el proceso y mantener cierta estabilidad durante más tiempo que los dientes y encías no cuidados.
Inside Out – Comercial de chicles Tripledent
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El chicle es una sustancia blanda y cohesiva diseñada para ser masticada sin ser tragada. El chicle moderno se compone de goma base, edulcorantes, suavizantes/plastificantes, sabores, colores y, normalmente, un recubrimiento de poliol duro o en polvo[1] Su textura recuerda a la del caucho debido a las propiedades físico-químicas de sus componentes poliméricos, plastificantes y resinas, que contribuyen a sus características elástico-plásticas, pegajosas y masticables[2].
Extracción tradicional del chicle del árbol de chicozapote (Achras zapota) en Quintana Roo, México. Esta forma de extracción haciendo incisiones en zigzag se conoce desde la antigua civilización maya, que la llama sicté.
La tradición cultural de masticar chicle parece haberse desarrollado mediante un proceso de evolución convergente, ya que los rastros de este hábito han surgido por separado en muchas de las primeras civilizaciones. Cada uno de los primeros precursores de la goma de mascar se derivaba de crecimientos naturales locales de la región y se masticaba puramente por el deseo instintivo de masticar. Los primeros masticadores no deseaban necesariamente obtener beneficios nutricionales de sus sustancias masticables, sino que a veces buscaban estímulos gustativos y la capacidad de limpiar los dientes o refrescar el aliento[3].
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La enfermedad de las encías no es algo que sólo les ocurra a las personas mayores. Los adolescentes también pueden padecerla. La enfermedad de las encías, también conocida como enfermedad periodontal, puede causar problemas que van desde el mal aliento hasta el dolor y la pérdida de dientes.
La enfermedad periodontal es la inflamación de las encías. Las encías forman parte del tejido blando de la boca. Rodean y sostienen los dientes y, cuando están sanas, tienen un aspecto rosado y firme. La enfermedad de las encías no tratada puede llegar a ser muy grave, haciendo que los dientes se aflojen o se caigan.
La enfermedad de las encías suele estar causada por la acumulación de placa (se pronuncia: PLAK). Esta capa invisible y pegajosa de gérmenes se forma de forma natural en los dientes y las encías. La placa contiene bacterias que producen toxinas que irritan y dañan las encías.
¿Te sangran las encías cuando te pasas el hilo dental o te cepillas los dientes? Lo más probable es que ya tengas la forma más leve de enfermedad de las encías, llamada gingivitis. El sangrado de las encías suele ser un signo de gingivitis. Otros signos de advertencia son la sensibilidad, el enrojecimiento o la hinchazón de las encías.
Si la placa de los dientes y las encías no se elimina mediante un buen cuidado dental diario, con el tiempo se endurecerá hasta formar una costra llamada sarro. Si el sarro se forma, empieza a destruir el tejido de las encías, haciendo que éstas sangren y se separen de los dientes. Esto se conoce como periodontitis, una forma más avanzada de la enfermedad de las encías.
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La enfermedad de las encías, también conocida como enfermedad periodontal, es una infección bacteriana que afecta a las encías y, a veces, al hueso que rodea al diente. Las enfermedades de las encías pueden afectar a un solo diente o a muchos, y van desde la irritación de las encías (gingivitis) hasta la infección grave (periodontitis). Es importante prestar especial atención a las encías, porque si no las cuidas, no estás cuidando tu boca.
Los términos “gingivitis”, “periodontitis” y “enfermedad periodontal” suelen utilizarse indistintamente, pero en realidad tienen tres significados distintos. Sin embargo, cada una de estas etapas tiene un impacto en la salud oral de Estados Unidos, con 24 millones de estadounidenses que han perdido más de 6 dientes debido a la caries o la enfermedad de las encías y 12 millones de estadounidenses han perdido todos sus dientes debido a la caries o la enfermedad de las encías
La enfermedad de las encías varía en gravedad desde el enrojecimiento y la inflamación de las encías (gingivitis) hasta una infección más grave (periodontitis). Los síntomas de la enfermedad de las encías no siempre son evidentes hasta que la gingivitis ha evolucionado a periodontitis. La gingivitis se define generalmente como una inflamación alrededor de un diente, que se produce cuando la placa y el sarro se acumulan en los dientes. La principal causa de la periodontitis es la falta de higiene bucal, y es más probable que se desarrolle en adultos de 30 años o más.