Fractura de boxeador
Según estimaciones recientes publicadas en el Journal of Orthopaedic Surgery and Research, aproximadamente una cuarta parte de las lesiones deportivas afectan a las manos o las muñecas. Las fracturas de mano y los dedos rotos están aumentando actualmente debido al aumento de la competición deportiva en todo el país, pero este tipo de lesiones también son comunes fuera del campo de juego, especialmente en los adultos mayores. Como parte del proceso natural de envejecimiento, nuestros huesos se debilitan con el tiempo, dejándonos más vulnerables a las fracturas y otras lesiones. Independientemente de la causa, existen muchos tratamientos y estrategias eficaces para las fracturas de mano que ayudan a acelerar el proceso de recuperación y a prevenir nuevas lesiones. En este post, explicaremos muchos síntomas comunes de la mano rota y qué hacer para una mano rota, incluyendo la terapia física y las opciones quirúrgicas. Echemos un vistazo…
Aproximadamente 6 millones de personas sufren una fractura de hueso cada año en los Estados Unidos, y las fracturas de dedos son muy comunes. La ubicación y la gravedad de la fractura de la mano determinarán los síntomas que experimente el paciente y las opciones de tratamiento disponibles. ¿Cómo se siente una mano rota? Veamos algunos de los síntomas más comunes de las fracturas de mano.
Fractura de mano
Una fractura de mano es una rotura de uno de los huesos de la mano. Esto incluye los huesos pequeños de los dedos (falanges) y los huesos largos de la palma de la mano (metacarpianos). Una fractura de mano puede estar causada por una caída, una lesión por aplastamiento, una lesión por torsión o por contacto directo en los deportes.
En la mayoría de los casos, una fractura de mano se cura bien con un tratamiento no quirúrgico. Dependiendo del tipo y la localización de la fractura, esto puede incluir el uso de un yeso, una férula o correas de sujeción durante un período de tiempo. Sin embargo, en el caso de fracturas más graves o de fracturas que no están bien alineadas, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para realinear las piezas óseas rotas.
La fractura de mano más común es la del quinto metacarpiano, el hueso de la mano que sostiene el dedo meñique. Esta fractura se denomina comúnmente “fractura del boxeador” y afecta al “cuello” del hueso, junto a la articulación del nudillo. La fractura del boxeador suele producirse al dar un puñetazo o golpear un objeto duro cuando la mano está cerrada en un puño.
(Izquierda) La fractura del dedo anular de este paciente no puede detectarse fácilmente cuando su mano está completamente extendida. (Derecha) Sin embargo, cuando cierra parcialmente el puño, la fractura es más evidente. El dedo anular fracturado se superpone al dedo meñique adyacente.
Lesiones en los dedos
Las fracturas son fisuras o roturas de huesos. Los niños y los adolescentes pueden romperse los huesos de los dedos o del pulgar (falanges), los huesos de la muñeca (carpos) o los huesos largos entre los dedos y la muñeca (metacarpianos).
Una lesión que rompa un hueso también puede dañar los cartílagos de crecimiento del niño o los tejidos blandos que están cerca del hueso o que se conectan a él, como la piel, los ligamentos o los tendones. El daño a los cartílagos de crecimiento o a los tejidos blandos puede afectar a la forma en que los médicos tratan la fractura de su hijo.
Debido a la remodelación, la fractura de un hueso de un joven se curará mejor y con menos tratamiento que una fractura similar en un adulto. Pero algunas fracturas que parecen sencillas de tratar pueden causar graves problemas a los niños o adolescentes y afectar a la capacidad de crecimiento del hueso.
Si el cartílago de crecimiento está dañado por una fractura u otra lesión, el hueso puede dejar de crecer. Este grave problema se denomina detención del crecimiento. La detención del crecimiento puede detener permanentemente el desarrollo del hueso y cambiar su funcionamiento. Si sólo una parte del cartílago de crecimiento está dañada y deja de funcionar, el hueso puede crecer de forma irregular.
Signos de un pulgar roto
Aunque los huesos de la mano son pequeños, un dedo roto (fracturado) no es una lesión menor. Los huesos de una mano normal se alinean con precisión. Permiten realizar muchas funciones especializadas, como agarrar un bolígrafo o manipular pequeños objetos en la palma de la mano. La fractura de un hueso del dedo puede provocar la desalineación de toda la mano. Sin tratamiento, el dedo roto puede permanecer rígido y doloroso.
La mano consta de 27 huesos: ocho huesos en la muñeca (carpos), cinco huesos en la palma de la mano (metacarpianos) y 14 huesos en los dedos (falanges). Las fracturas del hueso metacarpiano que da lugar al dedo meñique representan aproximadamente un tercio de todas las fracturas de la mano en adultos.
Por lo general, la fractura de un dedo se produce como resultado de una lesión en la mano. Uno puede fracturarse un dedo cuando se golpea con los dedos en una puerta, cuando extiende la mano para amortiguar una caída o cuando se atasca el dedo al intentar coger una pelota. Un descuido al trabajar con sierras eléctricas, taladros y otras herramientas puede provocar una fractura de dedo.